Capítulo 35.

Pedro: comencemos.

Paula: mira si hay todo para cocinar las pizzas.

Pedro: Pau yo prepare todo –ríe-

Paula: tanta confianza tenías de que iba a venir? –ríe-

Pedro: claro.

Paula: genial –ríe- ahora sí… comencemos.

Comenzaron a reparar la masa, en realidad Pedro solo miraba como Paula amasaba, un rato después Paula metió la masa al horno para que se cocinara un poco, se dio vuelta y io que Pedro le hizo una seña para que se acercara a él, ella se acerco.

Paula: qué?

Pedro: nada, solo que te amo mucho –termino la frase y agarro con du dedo un poco de harina que estaba  a su lado y se la puso a Paula en la nariz-

Paula: ¡Pedrooooooooo! –grita-

Pedro: solo es un poco de harina mi amor –ríe-

Paula: solo es un poco de harina mi amor –lo imita irónicamente-

Edro: que gruñona –ríe-

Paula: bueno, bueno –hace una sonrisa falsa- mi amor…

Pedro: qué?

Paula: nada, solo que yo también te amo –mientras dice eso se acerca él como para besarlo pero no hizo eso, ella agarro la harina que estaba a su lado y se la tiro a Pedro por toda la cara, sin piedad alguna-

Pedro: ¡noooooooooooooo! –grito-

Paula: báncatela mi amor, vos empezaste.

Pedro: sos lo mas –ríe- báncatela vos ahora  -termino la frase y le tiro aún mas harina de lo que ella le tiro a él-

Paula: ¡te matooooooooooo! –se limpio un poco la cara, agarro un poco  de harina y comenzó a perseguir a Pedro quien había comenzado a correr en círculos por la cocina después del ‘’e mato’’ de su novia- veni acá –grita, lo alcanza y se le tira encima tipo koala, pero por atrás para que no se le escape, lo gira y le tira la harina, mucha harina.

Pedro: ya bastaaaaaaaaaaa –grita y comienza a hacerle cosquillas a Paula que seguía tirándole harina-

Paula:  para, para, paraaaaaaaaa…

Pedro: -para de hacerle cosquillas y al mismo tiempo ella para de tirarle la harina- qué? –se limpia la cara que estaba llena de harina-

Paula: tregua? –le pasa la mano-

Pedro: tregua –agarra la mano de Pau y la trae hasta él, abrazándola tiernamente por la cintura y dándole un dulce beso-

Paula: e amo –beso-

Pedro: o también –chape-

Paula: -intentando separarse del ‘’chape’’- mi amor -Pedro no la soltaba- Pedro…

Pedro: -deja de besarla- qué?

Paula: la masaaaaaaaaaa –grita-

Pedro: uuuuuuuh –grita, rápidamente va a apagar el horno y saca la masa del mismo-

Paula: deci que estaba en mínimo, a ver –dice e intenta ver si la masa se quemo- esta justita –dice aliviada-

Pedro: si?

Paula: si, casi nos quedamos sin cena por tu culpa mi amor –mirando a su novio-

Pedro: vos cooperaste bastante eh –ríe-

Paula: -ríe- tarado.

Pedro: que agresiva mi pandita –ríe-

Paula: cashateeee –dice algo graciosa-

Pedro: te amo –la besa-

Paula:  yo también, pero terminemos que si no cenamos mañana por la noche –ríe-

Pedro: dale.

Terminaron de cocinar y pusieron las pizzas al horno para que terminaran de cocinarse.

Paula: mi amor, mientras las pizzas se cocinan voy al baño, si?

Pedro: dale, es por ahí –le indica- vos quedate tranquila, que yo cuido las pizzas.

Paula: eso espero –ríe-

Paula fue al baño a lavarse la cara que dicho sea de paso seguía con un poco de harina, se mojo un poco el pelo y se hizo un rodete con mechones sueltos, hizo sus necesidades y volvió a la cocina donde se encontraba su novio.

Paula: volvi –ríe-

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