Capítulo 20.

En la casa de Pedro… Llego después de su día con Paula fue a su cuarto y se quedo pensando, en todo lo que había pasado, después de un tiempo  tocaron su puerta y fue a abrir.

Pedro: papá, que pasa?

Horacio: Fede no está y necesito tu ayuda, veni al garaje –y se va-

Pedro: voy –se pone los zapatos y baja- que paso?

Horacio: el auto está descompuesto.

Pedro: ok, en que ayudo? –Horacio le da las órdenes y el comienza a ayudarlo, después de casi hora y media terminan-

Horacio: proba si arranca Pedro.

Pedro: ok –sube al auto y arranca- listo, ya funciona.

Horacio: genial, gracias hijo –le da palmazos en el hombro-

Pedro: de nada, subo al cuarto.

Horacio: anda.

Pedro subió al cuarto y lo primero que hizo fue escribir a Paula para comentarle algo sobre aquel lugar  donde habían ido, ella respondió de inmediato y él también, dejo su teléfono y fue a ducharse.

Después de cenar y de un rato de ver tele quedo dormido.

Al día siguiente Paula y Pedro se levantaron con la rutina de siempre, pero había quedado en llegar a hora justa para el ensayo porque ambos estaban muy cansados, llegaron al teatro se saludaron fugazmente y comenzaron con el ensayo, luego este término. Paula agarro sus cosas y estaba yendo para el baño, pero sintió que alguien la agarro abrazándola por la cintura.

Xx: a dónde vas? –susurrando en su oído-

Paula: -gira hacia la persona- ¡Pedro! Me asustaste.

Pedro: mi amor te amo, voy al baño –dice irónicamente-

Paula: tontito, es que me asustaste –abrazándolo del cuello-

Pedro: si?

Paula: si –puchero-

Pedro: te amo.

Paula: yo te amo –lo besa-

Pedro: bueno, anda hace lo que ibas a hacer y yo te espero afuera.

Paula: ok, -lo besa-

Ya cambiada Paula va a fuera y al no ver a Pedro siguió caminando para ir a su casa un tanto enojada, hasta que alguien la vuelve a agarrar de la cintura, y si, era él.

Pedro: te ibas sin mí –susurrando nuevamente en sus oídos-

Paula: si, pensé que te cansaste de esperar y te fuiste –girando hacia el-

Pedro: jamás.

Paula: dónde estabas?

Pedro: entre a buscar algo que me había olvidado.

Paula: ah –seca-

Pedro: te enojaste?

Paula: no.

Pedro: a mi me parece que si.

Paula: te parece mal.

Pedro: ok, una sonrisa?

Paula: -sonríe irónicamente- listo.

Pedro: si seguís con esa cara te hago cosquillas.

Paula: ni se te ocurra.

Pedro: cambia la carita entonces, y ámame mucho.

Paula: te amo mucho, no hace faltan las cosquillas para eso.

Pedro: si? No estás mas enojada?

Paula: nunca me enoje.

Pedro: mmm, dame un beso así te creo.

Paula: -le da un pico-

Pedro: no, un beso, beso, no un pico.

Paula: y si no?

Pedro: si no te lo doy yo –termino de decir eso y comenzó a besarla-

Paula: tonto.

Pedro: te amo.

Paula: yo también mi amor –lo besa-

Pedro: te llevo hasta tu casa, eh.

Paula: vamos.

Mientras iban yendo a la casa de Paula, ella le comento a Pedro lo de salir mañana al shopping y que invitara a Hernan porque iba Zaira, y acepto y quedaron en verse para ir al cine los cuatro juntos, ya enfrente a la casa de Paula.

Paula: chau mi amor, nos vemos mañana.

Pedro: chau, te amo –beso-

Paula: yo más, te amo te amo te amo, mucho –chape-

Pedro: nos vemos mi amor –beso-

Paula: andate ya que si no, no te suelto mas –beso-

Pedro: -ríe- no quiero que me sueltes de todos modos –beso-

Paula: pero te tenes que ir –beso-

Pedro: ya se –beso-

Paula: te amo –beso-

Pedro: yo mas –beso-

Paula: bueno –pico- mi amor –pico-  andate –pico- ya –pico-

Pedro: chau –chape-

Paula: chau –pico y Pedro se va-

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