Hernan: cierto, nos estábamos hablando de nada –confuso-
Zaira: mmm… que se llevan entre manos?
Hernan: nada, mira –le muestra su mano, tal cual tarado y
todos ríe-
Paula: mamerto –ríe-
Zaira: hacemos de cuenta que les creemos Pau?
Paula: ok –se sienta arriba de Pedro y le da un beso en el
cachete-
Pedro: y eso?
Paula: signo de que te creo –guiño-
Pedro: te amo –la besa-Paula: yo también –lo besa-
Zaira/Hernan: estamos acá –tos tos-
Paula: -limpiándole la boca a Pedro- si si, perdón –ríe-
Zaira: ok, que hacemos
Todos: nose.
Zaira: helado?
Todos: dale.
Recorriendo el shopping encontraron la heladería, entraron y
fueron a la caja.
Zaira: ustedes?
Todos qué?
Zaira: que van a pedir?
Paula/Pedro: chocolate con frutilla –ambos se miraron
sonriéndose dulcemente al darse cuenta que tenían gustos iguales, se dan un
pico y vuelven a mirar a sus amigos, no podían creer cuanto en común tenían-
Zaira: bue, hasta los mismos gustos de helado tienen –todos
ríe- vos Nan?
Hernan: elegí vos primero.
Zaira: ok, dulce de leche con crema americana.
Hernan: ufa –puchero-
Zaira: que?
Hernan: casi coincidimos.
Pedro: papanata –grita y todos ríen-
Paula: shhh, es un dulce mi amor, no digas so –ríe-
Hernan: esa Paulita –grita y choca los cincos con Paula,
mientras Zaira solo mira y ríe ante toda esta incómoda situación para ella-
Pedro: mi novia es lo más, no? –le da un pico a Paula-
Hernan: mmm –se hace el pensativo-
Paula: ¡Nan! –grita, le pega en el hombro y todos ríen-
Hernan: chiste, chiste.
Paula: mas te vale –ríe-
Les dan el helado y van a sentarse a una mesa, por unos
cuantos minutos todos quedaron callados, hubo un incómodo silencio, hasta que
Zaira decidió hablar.
Zaira: Pedro –dijo de la nada-
Pedro: qué?
Zaira: contanos algo…
Pedro: em, como qué? –aún sin entender nada-
Zaira: a ver –hace una pausa, tipo cargándolo a Pedro de
lento, mientras Paula y Hernan ríen y Pedro mira con atención- cuando una
persona le dice a otra ‘’contanos algo’’ es para sacar un tema de conversación
y no quedarse en silencio por los siglos de los siglos, no importa de que,
simplemente es contar algo, consiste básicamente en eso –hace nuevamente un
pausa y lo mira fijamente a Pedro- entendiste Pedrito?
Pedro: em, si, pero hacía falta tanto monólogo? –todos ríen,
menos Zaira que se cruza los brazos y pone cara de enojada-
Zaira: ¡Pedro! –grita aún cruzando los brazos y mirándolo
con ganas de matarlo-
Pedro: bueno bueno, ahí va…
Paula: dale neneeeee –grita y todos ríen-
Pedro: para gruñonsita.
Paula: eu –le pega en el hombro a su novio y hace puchero-
Pedro: -ríe- te amo.
Paula: yo también –lo besa en la comisura de los labios-
ahora…
Pedro: qué?
Todos: ¡CONTAAAAAAA! –gritan fuerte-
Pedro: ya ya, una vez cuando era chico, tenía como 6 años y
estaba enamorado de mi profe –hace una pausa- y le escribía cartitas, poemas,
le llevaba flores –hace otra pausa, viendo como todos miraban atentamente- como
lo amaba a mi profe Juan Carlos –viendo como todos lo miraban con la boca
abierta, no aguanto más y comenzó a reir sin parar, estaba tentadísimo-
Paula: nos estas cargando?
Pedro: -riendo sin parar- si –aún riedo- tenían que ver sus
caras –ríe cada vez más- por diosssssssssssssssss –ríe- soy lo más.
Paula: lo más tontito –le pega en el hombro-
Pedro: auch –se frota el hombro- así me amas.
Paula: claro –pico-
Zaira: te pasaste boludo –ríe- cuando dijiste ‘’Juan
Carlos’’ yo dije este chico esta loco –todos ríen-
Hernan: que winner –ríe-
Los chicos siguieron charlando y cada uno tiraba chistes,
algunos buenos, otros no tanto, pero las risas siempre estaban, ya era las 21 mas
o menos, ellos seguían charlando hasta que…
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