Capítulo 70.

Pedro pone en marcha el auto, y lo encamina a su departamento, 20 minutos mas o menos pasaron y estos se encontraban llegando a aquel departamento, Pedro como siempre baja a abrirle la puerta a su novia, esta solo sonríe ante el acto de caballerismo que siempre tenía y le da un pico, baja y camina hasta la puerta mientras Pedro termina de cerrar el auto, Paula que estaba enfrente a la puerta y siente que Pedro la abraza por atrás depositando un beso a uno de los costados de su cuello, sonríe, y toma los brazos del mismo, los cuales rodeaban su cintura.

Ya adentro Pedro termina de cerrar la puerta mientras Paula va hasta la cocina en busca de agua, antes que gire para volver hasta donde estaba su novio, siente que la vuelven a agarrar por la cintura y vuelven a depositar un beso en su cuello, sonríe y gira, era Pedro, obvio, con su sonrisa de siempre, esa sonrisa tan linda, que tanto amaba, la que produjo que ella también sonría.

Pedro: te amo –susurra con un tono tierno, sonriendo-

Paula: te amo mas –susurra al igual que el-

Comienzan a besarse tiernamente, beso que a medida que pasaban los minutos iba aumentando la intensidad, ambos estaban dispuestos a todo, Paula acariciaba el cabello de Pedro, mientras este la levanta ligeramente sobre la mesada, seguían besándose, como si el mundo terminara mañana, si se separaban era cuestión de segundos solo para inhalar el aire que les faltaba, la pasión y el amor había invadido sus cuerpos, Pedro iba bajando sus manos hasta la cintura de Paula, acariciado cada parte de su columna vertebral, poco a poco fue levantando la blusa que llevaba puesta esta, termino de sacarla y ambos volvieron a fundirse en uno de esos tantos besos llenos de amor y pasión pura, besos que Pedro los fue llevando hacia el cuello de Paula, besos que poco a poco bajaba más, hasta el punto de llegar al hueco de los pechos de Paula y depositar un dulce beso ahí, ese beso que hizo estremecer a Paula por completo y que por consecuencia largue un pequeño suspiro, subió nuevamente hasta su cara recorriendo el camino con cada beso, hasta llegar a su boca y depositar otro beso ahí, ella comenzó a desprenderle la camisa, depositando varios besos en el cuello de Pedro, después de cuestión de segundos la camisa ya estaba en el suelo, y esta acariciaba cada parte de su espalda mientras ambos saboreaban cada parte del cuello del otro, volvieron a mirarse, sonrieron y Pedro la subió por su cuerpo haciendo que las piernas de ella lo rodeen y la traslado hasta la habitación.

Al llegar ahí chocan contra la puerta, ya que estaba cerrada y antes de abrirla Pedro se desase del corpiño que llevaba puesto Paula, abre la puerta y ambos siguen besándose, no había ningún tipo de alumbramiento cosa que provoca que no vean la cama y caigan torpemente en ella,  sonríen ante este acto de torpeza y vuelven a hundirse en ese beso tan dulce pero a la vez apasionado, con besos y caricias se despojan de sus últimas prendas y vuelven a unirse, vuelven a hacer ese acto que los llenaba de amor y placer, besándose, amándose, cuidándose.

Luego de haber terminado ese acto de amor ambos quedan abrazados, ella mirándolo, acostada por su pecho, y el abrazándola mirando el techo

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